Escuela de Shiatsu Made in Málaga

Mejorar la salud con Shiatsu y Salud Made in Málaga

Mi nombre es Mateo, vivo en Málaga desde hace algo más de 20 años, tantos como los que llevo dedicados al Shiatsu, mi amada profesión.

Posiblemente no hayas oído nunca antes esa palabra “Shiatsu”,  o tal vez la hayas oído pero no sepas bien de que se trata, pues bien, intentaré en este artículo contarte algo sobre qué es, cómo funciona y cuál es su utilidad.

Shiatsu es una palabra japonesa compuesta por dos ideogramas o kanjis, el primero “shi” significa dedo y el segundo “atsu” significa presión, por lo que podríamos decir que “Shiatsu” significa presión con los dedos. Una técnica que su creador, el Maestro Tokujiro Namikoshi, allá por el 1.912, descubrió con apenas 9 años, tratando de librar a su madre del continuo dolor que sufría en sus articulaciones por una artritis reumatoide. 

El resultado de su afanado esfuerzo por ayudar a su madre dio sus frutos, logrando finalmente su plena recuperación. Años más tarde, en 1.955, el Shiatsu fue reconocido oficialmente por el Ministerio de Salud y Bienestar Japonés.

A estas alturas ya debes suponer que el Shiatsu es una terapia manual procedente de Japón, pero tal vez, por ese concepto que tenemos de oriente, quizá pienses que está relacionada con cuestiones energéticas y no es así, el Shiatsu Namikoshi basa su eficacia y desarrollo en el conocimiento anatómico y la fisiología humana, aunque actualmente, en occidente, no de descarta la aplicación adicional de los principios energéticos de la Medicina Tradicional Oriental.

Gracias a su enfoque holístico, el Shiatsu de diferencia bastante de otros tipos de técnicas manuales. El terapeuta de Shiatsu no es capaz de separar al ser humano en sus elementos. La evidencia en el día a día de la consulta, nos muestra que el cuerpo trata de ser coherente con la estructura mental, una mente rigurosa y exigente nos generará un cuerpo rígido. De igual forma, cuando modificamos y relajamos el cuerpo, la mente se amolda en la misma medida.

Esto nos muestra, que muchas contracturas nada tienen que ver con los músculos, sino que nacen del desorden en los órganos y también nos enseña, que el estado de esos órganos internos e incluso nuestra postura, están directamente relacionados con nuestras emociones y nuestros pensamientos. Todo en nosotros está estrechamente relacionado y conocer estos vínculos, le permite al terapeuta llegar hasta el origen del desequilibrio y el dolor.

Cada presión de Shiatsu en el lugar, la dirección, la intensidad y el tiempo adecuado, produce en el cuerpo un estímulo que el organismo procesa y transforma para convertirlo en un recurso de reequilibrio. Por lo tanto, no es la acción directa del terapeuta la que restablece el buen funcionamiento de la estructura, sino el proceso interno que el cuerpo del paciente lleva a cabo.

De esa forma, cada cuerpo construye una recuperación a su medida y no impuesta por la mano del terapeuta. Y de esta forma también, el terapeuta comparte el protagonismo del proceso de recuperación con el paciente, dándole a este, la oportunidad de participar en su propia transformación, y haciéndolo consciente de su responsabilidad en el proceso. Este es para mí, uno de los principales valores que el Shiatsu lleva emparejado y que pocas personas conocen.

Dicho lo anterior, ya podéis imaginar que el Shiatsu tiene una enorme versatilidad  ya que parte de acción terapéutica la construye el propio organismo en la medida justa de sus necesidades, por lo tanto con Shiatsu se puede tratar cualquier problema muscular y tendinoso como el dolor de espalda, cuello y hombros, problemas circulatorios como la retención de líquidos, la inflamación o la falta de riego sanguíneo y los derivados de la alteración del Sistema Nervioso Autónomo como el estrés, la ansiedad o el insomnio.

Nuestra cultura de la salud en occidente nos lleva a pensar en ella cuando el dolor se hace presente y buscamos una solución rápida para que este desaparezca y evidentemente, el Shiatsu es una magnífica herramienta para ello, pero si nos acercamos al concepto de la salud en oriente, entenderemos que es la prevención, es decir, no esperar a que el desequilibrio se produzca, es lo que nos permite una mejor calidad de vida. Muchos de nuestros pacientes, una vez resueltos sus problemas, continúan recibiendo Shiatsu con un programa de mantenimiento de una sesión al mes, lo que les permite disfrutar de una sensación de bienestar permanente.

Nuestra filosofía de trabajo en Shiatsu & Salud está orientada a que nuestros pacientes comprendan, que nuestro compromiso no consiste en ser capaces de vencer el desequilibrio o eliminar el dolor, sino en brindarles una mejor calidad de vida.

Seguiremos en esta hermosa ciudad de Málaga, contribuyendo a mejorar la salud de quienes ya han puesto su confianza en nosotros y de quienes deseen conocernos en el futuro.

Un Saludo!

Mateo García del Río Fernández

Director de Shiatsu & Salud