Genios de la pintura y escultura nacidos en Málaga
Las expresiones artísticas de una sociedad determinan su cultura, tradiciones e historia, que se comparten como manifestaciones con sentido y un contexto social, contribuyendo al desarrollo económico, mientras sirven de protección de su patrimonio y valores culturales.
La pintura y la escultura son esas representaciones que se proyectan más allá de la individualidad como formas materiales de ideas, trazos y manualidades que, en parte, contribuyen a la transmisión del conocimiento y la propagación de movimientos artísticos con sus estilos versátiles, completos y transformadores.
Las actividades estéticas como técnica siempre ha sido la forma en la que los seres humanos han proyectado sus pensamientos y opiniones basadas en la realidad de las diferentes épocas para dar a la pintura y las esculturas los toques propios de sus manos. Tal y como se puede apreciar en el Guernica de Picasso, obra claramente marcada por los acontecimientos sucedidos durante la guerra civil española.
La tradición de una región comienza con la enseñanza de esta en el seno familiar y su difusión en la vida de los niños, jóvenes y adultos que interactúan en torno a la riqueza que las obras representan y que se materializan con el transcurso de los años hasta perfeccionarse y evolucionar.
Una ciudad sin arte tiende a desaparecer. Como expresión humana, tiene muchas maneras de manifestarse, apareciendo y consolidándose como la identidad de la creatividad e innovación. Su principal característica es el reconocimiento de los artistas y su origen, que participan con sus creaciones en la identificación de su forma de ver la vida.
Málaga es sinónimo de artistas afamados que encontraron en su vocación la manera de plasmar sus valores a la construcción del intelecto con voz propia, y que se han convertido en personajes célebres, iconos de una dimensión cultural única en el mundo.
El don de contribuir a su stock artístico no es para cualquier autor, es para dignos representantes de conceptos que han asumido su formación desde una temprana edad, de la mano de los mejores maestros, expertos en su afición.
Málaga, su pintura y escultura
Málaga es una ciudad de tradición, libertad de expresión, diversidad cultural y riqueza arquitectónica que alberga dentro de los muros de sus construcciones los simbolismos de pintores y escultores, abarcando los diferentes estilos, materiales y técnicas con los que podemos encontrarnos en medio de un paraíso museístico digno de exposiciones temporales o permanentes, y actividades educativas sobre temas relacionados a sus obras.
Como no puede ser de otra manera, la finalidad de estos centros es conservar, exhibir, difundir y admirar lo hecho por grandes exponentes que dejan ver en cada trazo, cada forma y cada color una proyección de impulso social y patrimonio cultural de la provincia. Ejemplo de ello es la Fundación Escultor Berrocal, que busca acercar a los visitantes a las obras de este magnífico escultor malagueño de la manera que él quería, tocando y vivenciando sus esculturas, ya que para Miguel Berrocal era imprescindible poder experimentar el arte de esa forma para disfrutarlo, entenderlo y valorarlo.
Sin duda, es una tierra donde ha nacido la genialidad, donde los espacios expositivos ofrecen una gran diversidad de estilos y formas que representan desde el arte contemporáneo, la escultura abstracta, hasta la artesanía más arraigada en las costumbres de sus habitantes.
Es en la maestría de trabajar la materia donde, quienes entran en contacto con el sentir de su vida personal y experimentan situaciones que marcan un antes y un después. Félix Revello de Toro, Eugenio Chicano, Enrique Brinkmann, Francisco Peinado y Antonio Montiel entre otros.
Son actualmente quienes marcan el camino para los que desean seguir sus pasos.